Ésta era una receta pensada para guisantes secos amarillos. Son una legumbre que nunca he visto en España; aquí se pueden encontrar lentejas rojas descascarilladas en las tiendas de dietética, pero los guisantes secos, también pelados, que en otros países son una legumbre de uso generalizado, aquí no los he visto nunca. Pero me gustaba la idea de una sopa de legumbres secas con guisantes así que lo hice con lo más parecido que tenía a mano: lenteja castellana. Que se supone que es un plato sencillo.
La sopa lleva: sofrito de cebolla y zanahoria, una patata, un vaso de lentejas limpias y enjuagadas, un poco de tomillo, pimienta de Jamaica (o nuez moscada si no tienes pimienta de Jamaica), y laurel. Pon más o menos el triple de agua o caldo que de lentejas y vigílalo para que no quede muy caldoso. Estará listo en unos 40 minutos.
5 minutos antes de que esté listo, añade 1/2 vaso de guisantes congelados. Está más rico con los guisantes apenas cocinados, un poquito al dente.
Y ya está, eso es todo. No comas lácteos en la misma comida: las lentejas, los guisantes e incluso la patata tienen bastante hierro, pero comoer lácteos en la misma comida impide que se absorban en el intestino.
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