martes, 8 de septiembre de 2009

la Mycook de Taurus

Les he enviado esta carta al servicio de atención al cliente por internet de Taurus. Una Mycook cuesta 799 euros, y una Termomix, 940. Cuando me regalaron la Mycook, la diferencia era mayor.

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Estimados señores,

Hace un poco más de un año que utilizo una “mycook” y lamento comunicarles que me parece una versión muy inferior al otro robot con capacidad de cocinar del mercado, la Termomix, con la que también estoy familiarizada. Son dos máquinas diferentes pero la mycook sale perdiendo en la comparación.

El principal problema que me causa es que el motor tiene poca potencia. No pica hielo. Tampoco pica fruta partida en pedacitos, con la que hacer helado. Si intento guisar o picar verduras, “sale andando” por la encimera de la cocina por las vibraciones que causa. En más de una ocasión he tenido que parar la máquina, vaciarla, y desatascar de las cuchillas un trozo de patata, zanahoria, o alimento de consistencia similar que impedía que el motor funcionara con normalidad. Un robot de cocina que no puede triturar un trozo de patata del tamaño de una nuez es simplemente inaceptable.

Por otra parte, el triturado de la Mycook es siempre irregular. Ni una sencilla crema de calabacines o salmorejo queda fina y suave, sino siempre con pedacitos o grumosa, independientemente de cuánto se pulse el botón Turbo.

El funcionamiento con la paleta mezcladora es pésimo porque sólo funciona con cantidades pequeñas de alimentos. La razón de que me haya decidido a escribirles esta carta finalmente es que se me ha sobrecalentado la máquina al intentar rehogar en ella el equivalente a un litro de calabacines y berenjenas que había troceado a mano en dados de un cm. Después de que se enfriara comprobé que podía, con gran dificultad, rehogar medio litro cada vez. No hay nada acerca de esta cuestión en las instrucciones. Si la máquina tiene dos litros de capacidad sin ese accesorio, y medio litro con él, debería ser indicado para que otros usuarios no tengan accidentes.

El segundo problema con el aparato, que he resuelto utilizando siempre recetas pensadas para Termomix, es que el libro de cocina que acompaña a la máquina es defectuoso e insuficiente. Defectuoso, porque es más frecuente que las recetas no funcionen a que sí lo hagan. Por ejemplo:

las mermeladas requieren el doble de tiempo del indicado.
La receta de boloñesa indica que la cebolla hay que freírla 6 minutos a 120º. A esta temperatura se quema hasta el punto de carbonizar las paredes de la máquina.
Esa misma receta indica un total de 5 + 7 + 2= 14 minutos de cocción para la salsa. Queda cruda; necesita aproximadamente el doble.
La receta de la pasta brisa no indica algo tan fundamental como que necesita ser trabajada en frío. Si se intenta estirar y dar forma inmediatamente después de amasada, se deshace entre las manos.

Y es insuficiente porque contiene un número desproporcionado de recetas festivas y pesadas y relativamente pocas de cocina de diario. Por ejemplo, en doce recetas de carne, se incluye la del steak tartare y tres recetas distintas a base de papada o panceta. Gustos culinarios aparte, se pretende que hacer una inversión en un electrodoméstico grande y caro sirva para facilitar el día a día, no sólo las ocasiones especiales. Esta insuficiencia provoca en cualquier usuario de mycook una dependencia de los recetarios de Termomix, aunque lo referente a la potencia del motor haya que adaptarlo.

Estoy recomendando a todo el que me pregunta que no se compre la mycook, a pesar de que la competencia sea un poco más cara. Por mi parte, estoy planteándome donarla a un comedor social o institución parecida para comprarme una Termomix. Me resulta triste porque quise confiar en una marca española, pero esta vez he fallado.

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